El Palacio de Partarríu o la villa de Parres, como también es conocido, te resulta conocido porque seguro que lo has visto en el cine o en la televisión, ya que fue el lugar elegido para rodar “el orfanato”
, película que triunfo en muchas salas, de España y del mundo. No fue “el orfanato” el debut cinematográfico de este palacio, aquí también se rodaron películas como “Los jinetes del Alba”, “mi nombre es sombra” o “la balsa de piedra”. Pero entre las paredes de este caserón además de rodarse historias de cine, se han vivido historias reales, que seguro han debido ser tan interesantes como los guiones de las películas a las que ha servido de escenario.
, película que triunfo en muchas salas, de España y del mundo. No fue “el orfanato” el debut cinematográfico de este palacio, aquí también se rodaron películas como “Los jinetes del Alba”, “mi nombre es sombra” o “la balsa de piedra”. Pero entre las paredes de este caserón además de rodarse historias de cine, se han vivido historias reales, que seguro han debido ser tan interesantes como los guiones de las películas a las que ha servido de escenario.
La historia de este palacio, situado a las afueras de LLanes, comienza en 1898, año en que finalizaron las obras de su construcción, promovidas por Don José Parres Piñera, personaje importante de la época que ocupó elevados cargos en los ministerios de la Marina, de Gracia y de Justicia. Don José estuvo casado con Antonia Sobrino Díaz, hermana de tres acaudalados emigrantes, cuya fortuna por aquella época era incalculable, por lo cual no tuvo problema alguno en financiar la magna obra de este caserón Indiano. Digo caserón indiano a pesar de que su propietario nunca fue emigrante, manteniéndose la mayor parte de su vida en LLanes, sino porque las características arquitectónicas del palacio Partarriú, la convierten en un ejemplo de los edificios indianos, que durante la segunda mitad del siglo XIX se construían por esta zona, financiados con las grandes cantidades de dinero que comenzaban a llegar de los países americanos. No faltan en la villa de Parres, ni las típicas palmeras, ni los amplios ventanales, ni una gran torre que presida su fachada principal, elementos típicos de estas casas de indianos, que su arquitecto Valentín Ramón Lavín Casalís incluyó en el proyecto de la obra. Orgulloso debió quedar su propietario al ver concluida su obra, aunque poco tiempo pudo disfrutarla, ya que muere en ella el 9 de noviembre de 1899 apenas un año después de inaugurarla. Pasó entonces a ser propiedad de sus descendientes, propiedad que aún conservan a pesar de que durante la Guerra Civil Española fue incautada para albergar un hospital.
Es evidente que Palacio Partarríu fue construido con amplios medios económicos y pocas limitaciones, conectada totalmente al exterior mediante enormes ventanales, en el que su arquitecto mostró toda su brillantez, construyendo un precioso edificio que le dio fama y prestigio permitiéndole acometer proyectos tan importantes como Las escuelas de la Arquera, o la Quinta Guadalupe, que en la actualidad alberga el archivo de indianos y que otro día visitaremos.
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C/ Marques de Canalejas s/n
33500 Llanes (Asturias)
Tfno: 985 400 164
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